“Una interminable columna de mujeres, niños y ancianos, que dejaban tras ellos un rastro de maletas reventadas, mulas muertas tumbadas de lado, míseros enseres yaciendo en el lodo, objetos heteróclitos cargados aprisa y corriendo por aquellos desdichados como preciados fragmentos de sus casas y abandonados en el camino cuando la idea misma de casa había desaparecido por completo de las mentes, cuando, por lo demás, todo pensamiento había desaparecido de las mentes. Durante semanas, mi madre caminó de la mañana a la noche, conservó el mismo vestido y la misma chaqueta tiesos de barro, se lavó en el agua de los arroyos….”.
Con este fragmento de su obra “No llorar”, la escritora francesa Lydie Salvayre ha abierto el encuentro que ha mantenido con sus lectoras y lectores en la Feria del Libro de Zaragoza. La novela, que le hizo valedora del premio Goncourt en 2014, se ha llevado al teatro por el director de escena Denis Laujol y su estreno en España la trae a nuestra ciudad con la colaboración del Institut Française de Zaragoza.
Después de la retirada, la madre de Lydie Salvayre se instaló en Francia, donde vivió hasta su fallecimiento. Contar la historia de su familia y dignificar la vida de su madre llevó a la escritora a emprender este proyecto. “La filosofía de mi madre, exiliada y extranjera, era pensar en no llorar, en apretar los dientes y no especular sobre el dolor y la victimización. Por eso el título me vino en seguida, por su idea de avanzar, su deseo de vivir”.
Este encuentro literario ha caminado entre la biografía, el conocimiento -y desconocimiento- de la revolución libertaria y otros episodios de la Guerra Civil, la confluencia de idiomas y el frañol y, sobre todo, la generosidad de una escritora que ha permitido que una de sus grandes obras se adapte al teatro.
“No llorar” tiene otro gran referente en España; la novela comienza con un fragmento de El Quijote, “un exiliado que se sienta frente a quienes piensan bien y toma posición por los más débiles y los perseguidos como quería la revolución libertaria, una ideología que no quería jerarquía y quería compartir, tenían un ideal utópico de libertad que solo duró unos meses”, ha explicado la escritora.
Lydie Salvayre ya era una referencia literaria para muchos de los asistentes a la reunión. Para otros ha sido un descubrimiento que abre el horizonte a nuevos títulos para leer. Y esta es la magia de los encuentros literarios de la Feria del Libro, la cercanía y el agradecimiento a nuestras autoras y autores favoritos, por su trabajo.
No llorar está publicado en España por Anagrama Editorial.
El encuentro con la escritora se realizó en El Ciclón.